miércoles, 3 de junio de 2009

Máxima

Convéncete de que la quieres.
Mírale a los ojos y piensa
que has luchado a muerte por conseguirlos,
aunque sean regalados.

Inventa una historia entre medias
para dar coherencia al conjunto.
Empápate de sonrisas secas,
aunque sean sus lágrimas.

Créete que la necesitas y básalo todo en ello,
porque en verdad necesitas llenar ese vacío.
Aférrate con fuerza y llora.
Tu cordura está en juego.

1 comentario:

  1. Me gusta un montón tío. Veo que sigues escribiendo, y encima lo haces cada vez mejor eh? Bueno, un besico niño y sigue así ;)


    Por cierto, me puse en tus seguidores ;)

    besazos guapisimo!!

    ResponderEliminar